MINISTRACIÓN EN EL DEPARTAMENTO DE NIÑOS: DIOS ES FIEL

Hola!!! Mi nombre es Sandra Nuñez, mi familia está compuesta por mis 2 hijos, mis
nueras y nietos. Soy pastora de niños, del Centro Cristiano Dios Es Mi Fuerza; y en esta
oportunidad voy a compartir mi testimonio de cómo llegue a los pies de Cristo.
A los 13 años conocí a Jesús.
Mi familia en ese momento estaba compuesta por mi papá mi mamá y mis 3 hermanos
y yo. La mayor de los cuatro hijos.
En ese momento estábamos pasando por un momento difícil como familia, ya que mis
padres estaban por separarse.
Pero un día mi papá salió para ir a trabajar, y a la noche no volvió a mi casa, y
pasaron unos días y no volvía, mi mamá y nosotros nos empezamos a preocupar, porque
él no regresaba a casa.
Entonces comenzamos a buscarlo; primero fuimos a la comisaría, luego a dónde él
trabajaba, ahí nos dijeron que en toda esa semana no se había presentado a trabajar.
Fuimos a la casa de mi abuela, no estaba en su casa y ella no sabía dónde podría estar.
Tengamos en cuenta que hace más de 40 años, y no había los medios de
comunicación que hay hoy.
Pasaron unos días más y seguíamos sin saber nada de mi papá, de la comisaría nos
avisaron que no había ningún reporte de accidente o en el hospital de mi papá.
Así que nos empezamos a asustar, y hablamos con mi mamá para que le pidiéramos
a mi abuela, mamá de mi papá, que nos llevara a la Iglesia a dónde ella se congregaba.
Ese día 17 de marzo de 1979, fuimos por primera vez a la iglesia, fue maravilloso, en
primer lugar porque mi mamá no quería saber nada de ir, cuando en otras oportunidades
nos habían invitado, su respuesta era no. Pero Dios en su amor y misericordia nos llamó
y oímos su llamado.
Participamos de esa reunión, sentimos la presencia de Dios, aceptamos todos juntos a
Jesús. Y hago un paréntesis, para contar que debido a los problemas que había en
nuestra casa, con mi hermana Fabiana íbamos todos los miércoles a la Iglesia católica de
Del Viso a rezar, y pedirle a Dios que interviniera en nuestra familia, sabíamos a pesar de
que éramos niñas que el único que podía hacer algo por nuestra familia era Dios.
Así que el haber participado de esa reunión, ver a tantas personas que oraban por
nosotros, sin conocernos y haber sentido la presencia de Dios nos lleno de una paz tan
maravillosa, que recuerdo que volvíamos a casa cantando uno de los coros que
habíamos escuchado: “Después de la tormenta viene la calma, viene la paz, si a Cristo de rodillas tú se lo pides Él te lo da”. Qué tremenda declaración hicimos todo el camino los 5,
mi mamá y nosotros 4 hermanos. Fuimos caminando porque quedaba a unas 25 cuadras
aproximadamente la Iglesia de nuestra casa.
Llegamos a nuestra casa, cenamos y nos acostamos….y esa madrugada, ocurrió
nuestro milagro. Mi papá regresó a casa…no puedo expresar la felicidad que sentimos
todos.

Mis padres se reconciliaron, mi papá que decía ser ateo, aceptó a Cristo en su
corazón…qué maravilloso es el amor de Dios!!!
Fue pasando el tiempo, la familia creció, Dios nos regaló a las 2 princesas menores, y
todos juntos siempre servimos a Dios. Hoy algunos están apartados, pero sé que ellos
cumplirán el llamado que Dios nos hizo como familia, nuestros hijos, nietos, bisnietos,
tataranietos, y todos los que Dios agregue a nuestra familia, siempre y para siempre le
serviremos.
Mis padres ya están en la presencia de Dios, pero de haber estado a punto de
separarse, Dios transformó sus vidas de tal manera, que llegaron a cumplir su boda de
oro, 50 años de casados, a pesar de las dificultades, que si las hubo. Pero Dios ha sido
fiel con ellos y lo sigue siendo con cada uno de nosotros sus 6 hijos.
Así pude conocer al Jesús de la vida, aunque le buscaba de forma incorrecta, Él se
manifestó a mi vida hace 45 años, y su amor y fidelidad, permanecen en mi vida.
Te quiero compartir un texto: “Isaías: 41: 13: Porque yo Jehová soy tu Dos, quien te
sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, Yo te ayudo”
.
Está Palabra me la dio el Señor cuando cumplí 15 años, y hoy tengo 58, y puedo
testificar con mi vida que así es, que Él me ha tomado de la mano y no me ha dejado
nunca, he pasado por momentos muy difíciles, de hecho en este tiempo estoy pasando la
prueba más difícil que mi Dios me ha dado, y es que hace muy pocos meses, mi esposo
partió a la presencia de Dios, ganó la carrera, recibió su premio… y a pesar de esa falta
tan grande en mi vida, puedo sentir que mi Dios me sostiene de la mano, y no me suelta,
porque no es fácil esta prueba….pero así como un papá toma de la mano a su niño, así a
pesar de ser una persona adulta, siento que me sostiene de su mano… porque si no, no
podría estar de pie, ni seguir caminando.

Tal vez te encontrás en el peor momento de tu vida y pensás que ya no hay
esperanza, que no hay nada que puedas hacer, o que a nadie le interesa tu vida…
déjame decirte que ese Dios grande y poderoso del que te estoy contando, hoy quiere
tomarte de la mano y nunca más te va a soltar, nunca más te va a dejar solo/a, porque te
ama como nunca nadie te amó y quiere estar en tu vida, en tu familia, en tu diario vivir, y
así como cambio el rumbo de mi familia que iba hacia la destrucción, así, si le permitís, va a cambiar el rumbo de tu vida, de tu familia!!! Sólo abrile tu corazón y acéptalo y vas ver
tu milagro hecho realidad.
Qué Dios te bendiga querido lector, con sus más ricas y abundantes bediciones.