Marcelo Hein es maestro de la escuela N° 19 de la Comunidad Kaaguy Pora 2 y dedica gran parte de su día a formar a niñas, niños, adolescentes y adultos. “Mi sueño es que lleguen a las universidades y regresen a devolverle a su comunidad todo lo que les brindó”, asegura.

“Arrancamos las clases debajo de los árboles, sobre una mesa de madera y un banco que construimos. Pero a los chicos no les molestaba porque es parte de su cultura”, cuenta el docente, de 39 años, que hoy se dedica casi de lleno a esos niños, niñas y adolescentes, y sus familias. Al año, venciendo las hostilidades climáticas de la selva, junto a la intendencia y los lugareños que se pusieron sobre los hombros la misión de tener un aula de verdad, construyeron un salón de madera. Y en febrero de 2020, gracias a un maestro itinerante, se inauguró un edificio de 300 metros cuadrados que actualmente alberga a 50 estudiantes de la primaria, 22 de la secundaria y además a 15 pequeños de entre 6 meses y 4 años. No son solo los contenidos académicos los que los estudiantes reciben en la escuela, sino que allí se los prepara para la vida. Además de la importancia que la escuela tiene para quienes allí estudian, hubo logros alrededor de la construcción del edificio y la comunidad gracias al esfuerzo de un grupo de personas: por medio de la intendencia de Bruno Beck se gestionó la perforación de los pozos de agua, el transformador de luz; y la cooperativa de agua

Cospval realizó la conexión de la perforación de agua. Entre todos lograron la llegada del agua potable, electricidad e internet, y reciben donaciones de elementos tecnológicos tanto como deportivos y significa un trabajo de integración inimaginable