La primera vez que Iván, Germán, Elena y Julieta pisaron una escuela fue hace apenas unos días. Para muchos adolescentes, ir a la escuela forma parte de su rutina diaria. Para ellos, que tienen entre 14 y 18 años, están diagnosticados dentro del espectro autista y ninguno se expresa verbalmente, esa visita fue un desafío al que nunca se hubiesen enfrentado sin la ayuda de una técnica que les permitió comunicarse por primera vez en sus vidas.
En verdad, no se trató de cualquier visita. A pesar de las dificultades que tienen para comunicarse, este año se propusieron rendir un examen para obtener su título del nivel primario. Y lo lograron gracias a que empezaron a ejercitar la comunicación con una técnica conocida como Rapid Prompting Method (RPM). Este método permite que personas con autismo que no se expresan verbalmente, puedan hacerlo deletreando palabras. Cada uno rindió el examen a su manera y con adaptaciones que contribuyeron a hacerlos sentir más cómo Con la ayuda de un equipo que los preparó en sus casas, el apoyo de sus familias y la comunidad de docentes y directivos de la escuela de educación de adultos Dr. Alfredo Colmo ubicado en el barrio porteño de Floresta, lograron cumplir un sueño y acceder al derecho a educarse. Ahora, esperan seguir avanzando en su educación y obtener el título secundario, como dar el examen mientras caminaban en el patio o cortar para salir a dar una vuelta a la manzana.
Diploma y medallas fueron entregados como a cada alumno que se egresó del establecimiento educativo,