Ap. Alberto Gallo
Creo en ti, creo en ti, haga guerra espiritual, mientras usted le está diciendo a Cristo creo en ti, creo en ti, sus problemas se van porque dice no estás creyendo en mis problemas dice, satanás, no estás creyendo en la enfermedad que yo traigo, no estás creyendo en la miseria, no estás creyendo en la discordia que traigo en el hogar, entonces si usted le dice: Creo en ti Cristo, todo eso se van en el nombre de Jesús; aleluya, Aleluya!!! Bendito sea el nombre del Señor.
Creo en ti, creo en ti, creo en ti Cristo, no creo en el problema, no creo en la necesidad, no creo en la enfermedad, no creo en la miseria, no creo en el rencor, no creo en los temores, creo en Cristoooo!!!
Oración: Señor estamos ante tu presencia y estamos aquí porque creemos en ti Señor plenamente, tú eres el que nos has movido en esta hora a poder estar en tu casa de oración, y declarar esta palabra Señor porque tú tienes nombre sobre todo nombre, porque en tu nombre se doblará toda rodilla y toda lengua confesará que tú eres el Señor. Nosotros hemos creído Señor, y hemos recibido tu paz, tu salvación, tu santidad, tu libertad Señor, hemos recibido Señor, y te hemos dado nuestro corazón como tu morada permanente Señor, no eres religión para nosotros, eres una relación profunda, y tú mismo dices que ya no nos llamarás ciervos, sino que nos estás llamando amigos, porque tú nos traes toda la revelación del Padre a nuestras vidas Señor, y sé que cuando cantamos y entonamos Señor, alabanzas las tinieblas se desvanecen. Señor si alguno está pasando por lucha y dificultad, oh no puede ver tu bendición, en esta hora no puede detectarla, abre los ojos de su entendimiento, dale Espíritu de sabiduría en tu conocimiento Señor. Padre clamamos porque tu palabra nos alienta a clamar, si alguno tiene falta de esa sabiduría que viene de lo alto, que te pida a ti y tú darás abundantemente; y yo lo creo y estoy dispuesto hoy para recibir tu palabra, movilizarme en tu palabra, ponerla por obra, ver tu gloria manifestada en mi vida, y que tu nombre sea glorificado Señor, en el nombre de Jesús amén, amén, y amén, Señor aleluya, gloria a Dios!!!
Caminar en el favor de Dios, fue oh es el tema de todo este fin de semana; el viernes el Espíritu Santo nos estuvo hablando que puso un poder dentro nuestro, y que si nos detenemos ese poder también se detiene; sabemos que Dios en el hombre puso el soplo de vida eso lo hizo un ser viviente, y de tanto en tanto sabemos que hubo personas escogidas, que el Espíritu Santo de Dios venía sobre ellos, pero llegó el momento de lo genuino, de la verdad, de la palabra de Dios, del cumplimiento de la promesa, y a través de la obra de Cristo allí en la Cruz del calvario lo que hizo el Señor, y dijo no los voy a dejar huérfanos voy a enviar al Espíritu Santo, para que esté con vosotros y en vosotros, y llegó el día de Pentecostés y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y de allí en adelante eso no se ha cortado mientras Dios encuentre vasijas que estén dispuestas a ser llenas de ese aceite divino, de ese fuego de Dios.
Dios está dispuesto a seguir llenando con su Espíritu Santo, y ese Espíritu Santo que está dentro nuestro, cuando usted se mueva el Espíritu Santo se va a mover, cuando usted quiera leer la Biblia el Espíritu Santo le va a revelar, cuando usted necesite fuerza al Espíritu Santo le dará fuerza, cuando necesite fe el Espíritu Santo le dará la fe, porque te hará recordar lo que escuchaste en una oportunidad, lo que leíste en otra oportunidad, te hará recordar la palabra te traerá memoria, y dirás cómo me acuerdo de esta palabra, si hace muchísimo que la escuché, pero sabes una cosa el Espíritu Santo dejó grabada la palabra en tu disco duro.
Espíritu Santo de Dios es esa energía ese poder que viene, pero no solamente es un viento, no es un fuego, no es una Paloma solamente; es una persona, es alguien que junto con el Padre y el Hijo forman la Trinidad de Dios. Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo, es Dios habitando en nosotros, es Dios dentro nuestro; claro que es un gran misterio como alguien tan grande puede habitar en alguien tan pequeño, pero es maravilloso; así que no se detenga, muévase y cuando usted se mueva el Espíritu Santo estará ahí, cuando usted ore el Espíritu Santo estará ahí, cuando usted crea el Espíritu Santo estará ahí, cuando usted cante el Espíritu Santo estará ahí, cuando usted llore el Espíritu Santo estará ahí, porque él está con nosotros todos los días hasta el fin del mundo. ¿Lo cree?
Ayer el Espíritu Santo nos habló de cómo manifestó su favor para el pueblo de Israel, cómo un pequeño pueblo tenía que enfrentar una gran batalla, y si usted lee la Biblia lo va a encontrar por todos lados, lo va a encontrar cuando tuvieron que cruzar el mar rojo, lo va a encontrar cuando tuvieron que cruzar el Jordán, eran cosas imposibles!!! Lo va a encontrar como un pequeño Ejército tiene que enfrentar a miles, lo va a encontrar como el Señor lo dejó a Gedeón con 300 para enfrentar a más de 100000; y va a encontrar el favor de Dios en una mujer que lloraba por un hijo y se ponía la presencia de Dios, y el sacerdote decía esta mujer está ebria, está borracha, mueve la boca y no se le escucha nada, no se daba cuenta al sacerdote que era una bendición; pero en el cielo su voz retumbaba, el cielo como fue conmovido, el corazón de Dios fue conmovido, y dijo: yo le envío lo que esta me está pidiendo, aunque el sacerdote no lo entendía, porque a veces los religiosos no entendemos lo que pasa en el Espíritu; y así continuamente usted va a ver en la Escritura, aquel anciano que ya llegaba a sus últimos días pero había tenido una promesa del Padre, vas a ver la salvación de Israel, y un día estaba en el templo y aparecieron José y María con el Niño Jesús el bebé, y cuando este hombre lo vio lo tomó en sus brazos y dijo: gracias Padre porque han visto mis ojos la salvación, la promesa que me diste aunque pasaron los años se cumplió; y luego vino la profetisa llevaba 84 años de ser viuda, y también pudo ver cumplida la promesa.
Quizás se te está pasando el tiempo, y a mí también, pero sé que Dios nunca falla, sé que Dios cumple sus promesas, y sé que no nos iremos de esta tierra sin ver las promesas de Dios cumplida, el favor de Dios manifestado.
Hoy vamos a hablar un poco lo que el Espíritu nos permita, ¿Cómo obtener el favor de Dios? Vamos a leer el Evangelio de San Juan: 3: 14 – 21: (NVI) Cómo levantó Moisés la serpiente en el desierto, así también tiene que ser levantado el Hijo del hombre, para que todo el que cree en él tenga vida eterna. Porqué tanto amó Dios al mundo que dio a su hijo único, para que todo el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna. Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él. El que cree en él no es condenado, pero el que no cree ya está condenado por no haber creído en el nombre del Hijo de único de Dios. Esta es la causa de la condenación: que la luz vino al mundo, pero la humanidad prefirió la oscuridad a la luz, porque sus obras eran malas. Pues todo el que hace lo malo aborrece la luz y no se acerca a ella por temor a que sus obras queden al descubierto. En cambio, el que practica la verdad se acerca a la luz, para que se vea claramente que ha hecho sus obras en obediencia a Dios. Amén!
Uno dirá bueno ¿qué tengo que hacer para obtener el favor de Dios? mire el 99,9% de la obra ya está hecha, y acá lo dice claramente porque así como Moisés en un momento tuvo que levantar una serpiente de bronce, en el desierto por mandato de Dios por causa de la desobediencia del pueblo, y él la levantó la serpiente la puso ahí y había serpientes ardientes venenosas que mordían a los demás y morían; pero había un mandato, algo tan simple, algo ilógico, algo que la ciencia desaprobaría en este tiempo, ¿cómo puede ser que por el simple hecho de mirar en un poste una serpiente de bronce, el veneno no tenga efecto? diga conmigo: “Dios es Dios” y cuando Dios determina algo, por más que le busque la vuelta Dios lo determinó y Dios lo cumple, alguno habrá dicho no que voy a mirar ahí, si me picó esta víbora y se morían, y otro dijeron: no yo voy a creerle a Dios y miraban la serpiente de bronce y el veneno no les hacía nada.
Por eso qué bien qué estuvimos cantando hoy, poner los ojos en el Señor, porque ahí está el gran secreto, no es ser religioso, no es seguir una estructura, no es hacer una ceremonia, es creer que Jesús murió allí en la Cruz, y cuando yo miro que él murió allí en la Cruz por mí el efecto del veneno del pecado desaparece de mi vida, ¡aleluya! Dice: para que todo aquel que cree en él tenga vida eterna, por eso no es solamente traspasar aquí en la tierra, acá estamos siendo entrenados, estamos como un poco Israel caminando por el desierto siendo entrenados, para luego heredar la tierra prometida.
Hermano viva de tal manera que no le quede duda que usted ya tiene la entrada al cielo, no por obra nuestra sino por la voluntad de Dios a través de su hijo Jesucristo, porque Dios amó tanto al mundo que vio que el mundo no se podía salvar por sí mismo, entonces dijo: envió a mi hijo, y sabe una cosa: todo tu esfuerzo, todo tu sacrificio, toda tu transpiración, toda tu ceremonia, todo lo que yo pueda hacer, Dios no lo tiene en cuenta; es como que no sirve para nada, ¿cómo que no sirve para nada? entonces me tengo que portar mal, no, no, no, todo lo que hacemos sirve cuando Cristo es lo primero en mi vida, cuando lo hago por amor a Cristo no para que me bendiga, lo hago porque me salvó, porque me bendijo, a veces hacemos las cosas para…voy a orar más para que Dios me ayude, voy a ofrendar más para que Dios me… voy a diezmar para que Dios…voy a servir a dios para… ¡No! yo le tengo que decir algo a usted: para, para de servir a Dios de esta manera, para de vivir de esta manera, invierte las cosas. y en todo tenemos que invertir porque vamos contra la corriente, pero entonces ¿cómo hago Pastor, cómo hago apóstol? Sencillo, todo lo que usted haga hágalo como para el Señor, dando gracias al Señor por lo que ya hizo en vos, y Dios que es un Dios que le gusta darte su favor, el favor de Dios te seguirá todos los días de tu vida; pero no hagas para que Dios vea, no hagas para… hago porque lo amo, hago porque quiero agradarle, lo hago porque me hace bien hacerlo, lo hago porque me conviene estar bendecido y acompañado del favor de Dios, todos los días de mi vida.
Obedezco para… ¡no! Obedezco porque lo amo y no lo quiero contristar, no lo quiero ofender, acá dice que el que cree en él no es condenado, ahora pero el que no cree ya está condenado por no haber creído en el nombre del hijo único de Dios, y esta la causa de la condenación, no es que Dios es malo, Dios es amor!!! el problema es que dice que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más a tinieblas, porque la luz del Evangelio te expone. Si entra al baño, oh donde tengas un espejo, y hoy vienen hasta los espejos con la luz; y uno dice: no, no, no, apaga la luz que me veo lindo así sin luz en el espejo, porque cuando prende la luz empieza a ver todos los defectos, algún puntito hay qué pasó acá se me cayó esto…no voy a otro espejo mejor, otro espejo que me mienta un poco; pero la luz pone todo en evidencia, toda tu vida es puesta en evidencia, no para condenarte sino para salvarte, no para avergonzarte sino para restaurarte, la luz de Cristo pone todo en evidencia para que vos y yo seamos genuinos.
Dios no nos eligió porque éramos buenos, porque dice que no hay bueno ni aun uno, simplemente Dios te eligió porque te amo, y amo de tal manera al mundo, “a todo el mundo”, una vez yo me quejé delante Dios, digo Señor esta persona está destruyendo la nación, y así orando por otras naciones también, como puede ser que esta persona esté ahí destruyendo la nación, éste tendría que irse al infierno ahora mismo, porque él no tiene problema de perjudicar familias enteras, y Dios me dijo ¿A cuál de tus hijos enviarías vos? Y me puse a ver y dije: a este no, a este tampoco, pasé por los 8 y dije no Señor ninguno, y yo amo a todos mis hijos dice el Señor, aunque mis hijos no todos me aman, aunque mis hijos no todos me obedecen, amo a toda la humanidad, y Cristo vino por toda la humanidad.
Tenemos el privilegio nosotros de haber respondido a ese amor, y amarle al Señor, tenemos ese gran privilegio, por eso creer en Jesucristo es el primer paso para poder obtener el favor de Dios, no portarte bien, no es ser un hijo ejemplar, porque puede ser un hijo ejemplar, un padre ejemplar, una madre ejemplar, totalmente incrédulos y que adoran otras cosas en lugar de adorar lo verdadero, y que confían en que ¡yo soy una buena persona, yo no le hago mal a nadie! No sé si alguna vez escuchó eso usted, pero no creen en Jesucristo, -no porque la iglesia está llena de hipócritas- y sí, si él vino a buscar lo que no sirve, lo vil, lo menospreciado, para transformarlo en hijo suyo, porque el pecado te llevó ahí hasta caer en lo más bajo, pero ¡para esto apareció el hijo de Dios!, porque el diablo vino para hurtar matar y destruir la familia, destruir a nuestros niños, destruir a nuestros jóvenes, pero Jesucristo vino para dar vida y vida en abundancia, entonces la fe en Jesucristo es la base para luego empezar a caminar en el favor de Dios, y no porque lo merecemos porque es un favor, es una bendición que Él tiene destinada para sus hijos.
Por el otro lado una vez que creemos en Jesucristo, y muchos ustedes ya lo han experimentado empiezan a buscar más la presencia del Señor, quieren vivir en la voluntad de Dios, quieren buscar su guía es una forma de también de entrar al favor de Dios, ¿para qué está usted acá hoy? -muy bien para orar, para entrar en comunión con Dios, para soportar algunos hermanos que son difíciles de soportar; y en todo eso usted demuestra la fe, demuestra el amor, porque si te juntas con todos los que te caen bien es fácil; entonces buscar la voluntad de Dios.
Dios anda en los prostíbulos ¿sabía usted? Él anda los prostíbulos buscando a sus hijos perdidos, Dios está en los lugares donde se consume y se vende droga porque está buscando a sus hijos pródigos, Dios no anda solamente en las iglesias, ¡No, no! Los creyentes estamos en las iglesias, porque venimos a ser entrenados y ser luz en medio de las tinieblas, y está bien; pero Dios anda en los lugares más oscuros porque él es luz, para traer luz a un corazón, Dios está ahí debajo de los puentes donde la gente se está drogando, Dios está ahí en las madrugadas donde algunos salen a arrebatarle cosas a otros, y quizá Dios lo está corriendo está diciendo: hijo deja de hacer eso antes que te pase algo. Dios nos está buscando a todos, Él no hace excepción, el ama a todos sus hijos, a pesar de que todos sus hijos no lo aman a él.
Cuando buscamos su voluntad es porque ya hemos creído en Jesucristo, sino nadie busca la voluntad de Dios, podemos buscar su bendición sí, pero una cosa es buscar la bendición del Padre, y otra cosa es buscar la voluntad del Padre, es imposible que si yo busco la voluntad no reciba también la bendición, pero si solo busco la bendición puede ser que la reciba pero va a ser transitoria porque no estoy buscando la voluntad, y al buscar la voluntad de Dios, esto me lleva también a una forma de comunicación con Dios, una forma de poder hablar y conectarme con él, conectarme a través de la palabra, a través de una un cántico, a través de una alabanza, a través de una prédica, o simplemente a través del silencio, decirle: Señor habla que tu hijo quiere escuchar tu voz.
Y si tendríamos que hacer un resumen, el favor de Dios en la Biblia es una expresión de su gracia y de su amor, ese es el favor de Dios; usted ¿quiere caminar bajo el favor de Dios? va a caminar bajo su gracia y bajo su bendición, bajo su amor, no es algo que yo me gano es algo que él me regala, Él se manifiesta protegiéndonos, se manifiesta proveyendo, se manifiesta guiando nuestras vidas, se manifiesta a través de la bendición de aquellos que lo buscan y se rinden a su voluntad, que quieren agradar el corazón del Padre.
Por naturaleza somos mentirosos, por naturaleza somos desobedientes, esto lo podemos ver en un chico que tiene toda la cara llena de dulce leche y usted le pregunta quién agarró el dulce de leche, y él le dice yo no fui; ¿oh no? Por naturaleza. Qué distinto es cuando usted pregunta ¿quién tocó esto? -fui yo, me equivoqué, te desobedecí- si Adán hubiese hecho esto, cuántos problemas nos hubiésemos librado no, cuando el Padre dijo: Adán ¿dónde está? -escuché tu voz y tuve miedo y me escondí-, bueno salga hoy del escondite mi hijo, porque a mis ojos no te puedes esconder, a ¿dónde huirás de mi presencia? y sabe una cosa la demostración de caminar con el favor de Dios y mantener ese favor de Dios todos los días de nuestra vida, esto no significa que no te va a ir mal a veces, esto no significa que no te vas a equivocar muchas veces, esto no significa que vas a errar a al blanco, esto es lo que significa de poder caminar en el favor de Dios, es que te sacudís el polvo, te levantas y seguís adelante, y seguís confiando en la palabra, seguís confiando en las promesas, esto me salió mal, acá me engañaron, me estafaron, acá tropecé porque no busqué la directiva de Dios, no me quedo llorando en eso ni echándole la culpa a nadie, me levanto porque sé que si me levanto el que está conmigo es más poderoso que el que está en el mundo.
Entonces ya sabemos la importancia de caminar en el favor de Dios, la importancia de manifestar el favor de Dios en todos los días de nuestra vida. Yo no tengo que andar mostrándole usted, mire lo que Dios me dio, mire lo que Dios hizo, mire lo que Dios me está dando, mire lo que Dios me prometió, ¡no! yo camino y disfruto del favor de Dios, tengo la paz de Dios a pesar de las tormentas, la tormenta puede estar fuera de mi vida pero la tormenta nunca está dentro de mi vida, hay gente que tiene todo resuelto a su alrededor pero en su cabeza tiene una batalla, una confusión que aun teniendo todo para tenerlos resueltos no tiene nada resuelto, porque tiene unos rollos en la cabeza que no lo dejan estar en paz y estar tranquilo.
Pero hoy usted puede poner los ojos en Cristo, hoy usted puede decir bueno yo tengo que cantar tengo que alabar, yo entendí este fin de semana que el favor de Dios está conmigo, no por lo bueno que yo hago sino por lo bueno que él es, y como él es bueno a mí me agrada servirle, me agrada hacer su voluntad, por eso en una oportunidad hice una canción, “más que tu bendición Señor, te quiero a ti, más que tu unción te quiero a ti, más que todo lo que tú me puedas dar, Cristo te quiero a ti”, porque si lo tengo a él lo tengo todo, pero a veces decimos: Señor dame esto, dame unción, dame aquello, prospérame y Dios en su amor te lo da, pero qué padre le va a negar algo a su hijo, si su hijo está haciendo la voluntad del Padre; si a veces nosotros aunque nuestros hijos se portan mal los bendecimos comprándole cosas que ellos quieren, y si nosotros siendo malo le sabemos dar buenas cosas a nuestros hijos, cuanto más nuestro Padre celestial, pero hay que cambiar el chip, hay que cambiar la mentalidad, no hago esto para que Dios me bendiga, sino porque Dios me bendice, porque Dios me da su favor todos los días de mi vida.
Hay un coro que representa lo que Dios nos habló ayer y cuando lo cantamos el poder de Dios se empezó a mover, hermano haga que el poder de Dios se mueva todos los días en su vida, tenga siempre un coro un alabanza, cuando no tiene que hablar con Dios, cuando no tiene una oración, usted puede cantar a Dios, porque Dios habita en medio de la alabanza de su pueblo; siempre recuerdo canciones de mis comienzos: “fácil es cantar decía una canción, cuando reina la paz, pero en el dolor es mejor cantar”, ¿Por qué es mejor cantar en el dolor? porque viene la paz y el dolor se tiene ir. ¿Entiende?
Cuando todo va bien quién no viene cantando y diciendo ¡Aleluya!, y desde la plataforma lo podemos animar a que levante las manos, y cante y adore, pero si le decimos: si le parece, si lo siente, si le parece aplauda, si lo siente haga esto o aquello, usted ya sabe en que condición estoy, y me va a decir: apóstol vino raro hoy.
Mire en una oportunidad, estábamos en el local donde empezamos y yo venía apasionadísimo, y todo esa noche grité: “todo lo puedo en Cristo que me fortalece y todo lo puedo en Cristo…” imagínese un local chico donde entrabamos 15 personas, y yo a los gritos…cuando nos íbamos para olivos, todavía vivíamos en olivos, llegamos y se me rompió el auto, se reventó el filtro de aceite y está debajo del múltiple, y yo dije: uh Señor ¿Qué hago ahora, cómo voy hacer? -¿Qué le gritaste a tus hermanos toda la noche?- Ah Señor pero yo soy zapatero no soy mecánico, pero ¿Qué le gritaste a tus hermanos? ponelo por obra ahora, por eso ahora cuando me viene el versículo digo: ¿Qué dice Filipenses: 3: 13? Se lo hago decir a usted.
Así que tragué saliva y dije: Señor ¿Cómo hago? y me dijo vos le gritaste, arréglalo, tampoco había economía para llevarlo a algún lado para arreglar así que, cenamos, puse una luz, todos se fueron a dormir y yo me quedé ahí… si usted me pregunta cómo hice, no sé hasta hoy no lo entiendo, pero todo lo puedo en Cristo, porque con una llave inglesa, una tenaza, y una francesa, saqué el carburador saqué el múltiple, y me fije que el filtro se había descabezado, y la cabeza quedó enroscada donde va el filtro, y dije: ¿Y ahora cómo hago? así que lo lavé bien con nafta, agarré poxipol, mire la inocencia no decir cómo el poxipol va a soportar la presión que tiene que soportar el filtro, pero todo lo puedo en Cristo, lo puse lo tuve hasta que se puso duro y lo dejé, volví a armar que no sé cómo, pero después de terminar de armara le puse las manos y le oré, durante 15 días el auto funcionó con el filtro así hasta que Dios me dio la finanza, lo llevé al mecánico, cuando el mecánico lo vio me dijo: cómo pudiste andar así… todo lo puedo en Cristo que me fortalece!!!
Dios te pone a prueba por tu palabra, y hoy cuando usted estaba cantando: “cataré y los muros caerán” le quiero decir lo que estuvo pasando, mientras se cantaba ese coro, todo royo que tenía en su mente, todos los problemas legales que tenía usted o ilegales, los demonios se empezaron a pelear entre ellos, los enemigos que usted tenía en su vida, achaques, enfermedades, deudas, hermanos los demonios que estaban sosteniendo eso para amargarte, para entristecerte se empezaron a matar unos contra otros, y te declaro por palabra del Señor porque al que cree todo le es posible, vas a empezar a cosechar desde hoy en adelante, porque Israel cuando cantó, cuando alabo, cuando glorificó el nombre del Señor, luego estuvieron días y días juntando el botín de guerra, hermano la guerra que ha venido a tu vida no es para destruirte es para prepararte un botín. Aleluya!!!
Termino con esto, hágase está pregunta ¿Estoy bajo el favor de Dios? usted no se puede juzgar y decir, no me porté mal, yo no he creído, no, no, hay cuatro cosas: Cree en Jesucristo – ahora al creer busco su voluntad, no para, sino porque me salvó – Esto también me lleva a intimidad con él, a una conexión de oración – y todo eso también me lleva a obrar con rectitud ¡A obrar con rectitud! me tengo que hacer cargo de las macanas que me mando.
En una oportunidad, mi pastor quería ver mi batería siempre limpia, yo tenía la desventaja que él para subir al púlpito pasaba por detrás de mí y observaba y me daba con su mano en mi nuca, pero un día llegué temprano como siempre a la iglesia para ir a agarrar los elementos de limpieza, que estaban en cuarto, fui y decía: “prohibido pasar” -un cartel- siempre voy, cuando quise poner mi mano en el picaporte, me dio como una electricidad, pero no tenía picaporte electricidad, no llegué a tocarlo, me agarró un temor reverente, y le dije Señor: hoy no limpio la batería, si el Pastor me dice algo le voy a decir: alguien puso un cartel, y pasó el Pastor me dijo algo, y fui y le dije: si pastor, pero mire pusieron un cartel ahí que dice: “prohibido pasar” – no pero para vos no- pero a mí nadie me avisó, pero vos si podes entrar a ese cuarto, ¡un cartel me detuvo! ¿Oh no te detiene una luz roja a vos?, y si te detiene una luz roja oh una amarilla te hace poner el pie en el freno, aunque algunos lo ponemos en el acelerador, ¿No? Para pasar antes que se ponga roja, ¿Por qué no puedes ver los carteles que Dios te está poniendo? En la Escritura hay cantidad de carteles, que dicen: ¡Prohibido! ¡Prohibido! ¡Prohibido! ¡Prohibido! Prohibido no creer, prohibido dudar, hay un montón de cosas que dice la Escritura.
Usted ahora repita la canción con entendimiento, hoy lo hizo en el Espíritu, empice a poner todas las cosas que lo han detenido, dolencias, enfermedades, resentimientos, malos recuerdos, heridas del pasado, herencias generacionales, que de tanto en tanto vienen a querer manifestarse y traer depresión, ira, angustia, empiece a poner delante suyo y decir: mala administración, Señor no es que tengo poco es que lo estoy administrando mal, ahora cómo Dios ha hecho para que se multiplique, oh que teniendo lo mismo avance más, porque para eso Dios, póngale todo problema hoy delante del Señor, porque desde hoy aquel que cree va a caminar en el favor, pero no porque por que usted se lo está pidiendo, porque Dios nos está diciendo: hijo quiero que camines en mi favor, -no yo me lo quiero ganar- ¡Hijo Cristo ya lo ganó por vos en la Cruz del calvario! Lo único que tenés que hacer es aceptarlo y ser agradecido.
Oración: Señor, yo te doy gracias porque conforme a tu Palabra todo este fin de semana he soltado la palabra, sé que la Palabra no volverá vacía, te doy gracias por las familias, de aquellos estén leyendo este escrito, que el poder de tu Espíritu Santo se manifieste y con esta declaración que ahora vamos a hacer Señor, sé que los muros caerán, sé que las cadenas se rompen Señor, porque sé que los enemigos se pelearán entre ellos, y nosotros seremos bendecidos Señor, y tendremos recompensa de guerra, Señor nuestra lucha no es contra las personas, no es contra sangre y carne, sino contra huestes espirituales de maldad.
Pero sé ahora que si caminamos bajo tu favor el enemigo se confundirá Señor, y no tendrá ni arte ni parte en contra nuestra porque el que está con nosotros es más poderoso que el que está en el mundo, yo lo creo Señor, de todo corazón y te pido que esta Palabra Espíritu Santo sea grabada a fuego en cada corazón.
Señor que sí por alguna situación el enemigo quiere arrebatar la semilla que ha sido sembrada en estos días, Señor no pueda, sino que produzca fruto a ciento por uno en cada corazón, caminar en tu favor porque hay un mundo que está necesitando de la luz, que tú has puesto en nosotros, para que vayamos y prediquemos el Evangelio a tiempo y fuera de tiempo, hay hijos tuyos que necesitan Señor ser rescatados en esta hora.
Yo te doy gracias Señor y recibe esta declaración, está oración que tu iglesia va a hacer, y que puedan comprobar que aún cantándola casi sin entendimiento los enemigos empezaron a pelear entre ellos, y los poderes de las tinieblas están cayendo ahora y el poder del El Espíritu Santo, ya ha preparado el botín Señor, ya ha preparado la recompensa para cada uno y lo creo en el nombre de Jesús. ¡¡¡Amén, amén y amén!!!
¡¡¡Cantaré y los muros caerán!!!
Haga conmigo esta simple oración: Señor Jesús, yo te doy gracias por recibir tu palabra, creo plenamente y te agradezco por ello, porque voy a caminar todos los días de mi vida bajo tu favor, enseñame a ser agradecido y poder compartir esta buena noticia, con todos aquellos que se me acerquen, quiero ser un testigo de tu poder, quiero bendecir a otros a través de mi vida, en el nombre de Jesús lo creo, lo recibo, y comienzo a vivirlo en el nombre de Jesús. Amén!!!
Padre te doy gracias por cada uno que hizo esta oración, te doy gracias Señor por cada uno de mis hermanos Señor y ¡¡¡Gracias, gracias, gracias, gracias!!! Porque reconocemos que separados de ti nada podemos hacer, gracias Señor porque tú harás caminar a cada uno en lo sobrenatural, gracias Señor porque ellos verán tu favor todos los días de su vida, gracias por todos los que vendrán también a través de la vida de ellos, del testimonio que ellos darán, gracias Señor porque los enemigos han sido derrotados, las cadenas han sido rotas, y los muros que no nos dejaban avanzar han sido derribados, Señor que toda la gloria y la honra sea para ti en el nombre de Jesús amén, amén!!!
